Japón se encuentra en estado de alerta ante la aproximación del tifón Lan a la costa del Pacífico, un fenómeno natural que ha desencadenado fuertes lluvias y oleaje en la región.
Las autoridades, han emitido advertencias sobre posibles deslizamientos de tierra e inundaciones a medida que el tifón avanza hacia la tierra firme. Así lo informaron medios internacionales.
El tifón Lan está previsto que toque tierra el martes por la mañana, hora local japonesa, en la isla principal de Honshu. Las proyecciones meteorológicas indican que en algunas áreas podría precipitar hasta 40 centímetros de lluvia en tan solo 24 horas, según reporta la agencia meteorológica japonesa. El tifón trae consigo el riesgo de violentas ráfagas de viento, alcanzando velocidades máximas de 162 km/h el lunes y 180 km/h el martes. La península de Kii, ubicada a unos 600 kilómetros al oeste de Tokio, podría ser afectada por las tormentas a medida que el tifón se desplaza hacia Osaka, la principal ciudad del oeste japonés.
El tifón Lan marca el séptimo fenómeno de la temporada en el Pacífico y su baja velocidad de avance genera preocupación sobre su persistencia y el prolongado impacto que podría generar. El meteorólogo jefe de la agencia meteorológica, Shuichi Tachihara, señaló en rueda de prensa que “la baja velocidad del tifón podría significar que su impacto puede durar mucho tiempo”. Además, advirtió que algunas áreas podrían recibir más lluvia en un solo día que su promedio mensual de precipitaciones en el mes de agosto.
Ante el inminente impacto del tifón, el sector del transporte ha tomado medidas para garantizar la seguridad. Japan Airlines (JAL), una de las principales aerolíneas del país, anunció la cancelación de 19 vuelos con origen o destino en Itami (oeste) para hoy, y otros 240 vuelos programados para el martes han sido suspendidos, afectando a aproximadamente 24,800 viajeros.
El país se mantiene en alerta máxima, con las autoridades y los ciudadanos preparándose para enfrentar el impacto del tifón Lan.
