En unas elecciones históricas, la coalición de centroderecha Alianza Democrática (AD) se alzó con la victoria en Portugal, poniendo fin a ocho años de gobierno socialista liderado por António Costa.
El líder de AD, Luis Montenegro, buscará formar Gobierno tras una ajustada victoria frente al Partido Socialista (PS) de Costa.
Con el 99,01% de los sufragios escrutados, AD obtuvo el 28,63% de los votos, apenas superando al PS que logró el 28,66%. Sin embargo, el panorama político se vio también marcado por el notable ascenso del partido Chega, que cuadriplicó su número de escaños respecto a las elecciones anteriores.
A pesar de la diferencia mínima entre AD y el PS, el líder socialista Pedro Nuno Santos concedió la victoria a Montenegro y anunció que liderará la oposición. Por su parte, Montenegro expresó su intención de formar Gobierno, descartando cualquier acuerdo con la ultraderecha y subrayando la importancia del diálogo entre los partidos políticos.
La jornada electoral no estuvo exenta de controversia, con incidentes de confusión entre los electores debido a la similitud de los nombres de AD y un partido de derecha, ADN. Esta confusión llevó a la denuncia de Alianza Democrática ante la Comisión Nacional de Elecciones.
