Lewis Hamilton se autocalifica de “absolutamente inútil” y sugiere que Ferrari cambie de piloto tras quedar eliminado en la Q2
Crítica personal sin tapujos
Hamilton, siete veces campeón mundial, fue eliminado en la segunda ronda de clasificación del GP de Hungría y terminó en 12.º lugar. En una entrevista con Sky Sports, afirmó: “Soy inútil, absolutamente inútil. El equipo no tiene problemas, el coche está en pole. Probablemente necesiten cambiar de piloto”. Agregó que su mensaje por radio de “every time, every time” significaba: “cada vez soy yo” al fallar consistentemente en clasificación.
Contraste intern equipo
Su compañero Charles Leclerc, en cambio, consiguió la pole position por primera vez en la temporada para Ferrari, rompiendo con la hegemonía de McLaren en el fin de semana. La diferencia entre ambos evidencia el desequilibrio actual dentro del equipo rojo.
Contexto y desempeño general
Desde su traspaso de Mercedes a Ferrari en enero, Hamilton ha tenido un inicio de temporada complicado: sin podios en Grandes Premios —más allá de la victoria en la carrera sprint de Shanghái— y una fuerte brecha de 30 puntos con Leclerc en el campeonato. Esta eliminación en Q2 es la cuarta de la temporada, lo que resalta su falta de adaptación a la estructura y ambiente de Maranello.
Respuesta del equipo
El jefe del equipo, Fred Vasseur, rechazó la autocrítica extrema de Hamilton, resaltando que en clasificación las diferencias fueron cuestión de décimas y que existen muchas lecciones por aprender tras una sesión tan ajustada en condiciones cambiantes. Vasseur defendió al piloto y confía en que el equipo superará estos altibajos.
Incertidumbre sobre su futuro
Tras la carrera, Hamilton dejó entrever dudas sobre su continuidad en F1. Aunque aseguró su amor por la competición, su tono enigmático y emocional avivó especulaciones sobre su estado mental y compromiso, especialmente durante el receso veraniego que se inicia tras el GP de Hungría.
Implicaciones deportivas
En la carrera posterior, McLaren logró el triunfo con Lando Norris, seguido de Oscar Piastri, consolidando su dominio sobre Ferrari tras una estrategia superior y mejor adaptación a las condiciones del circuito Hungaroring. Leclerc terminó cuarto tras perder ritmo y caer fuera del podio debido a fallas mecánicas y errores tácticos del equipo