En su intervención en el Nueva Economía Fórum este martes, el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, destacó la urgencia de establecer un fondo europeo de defensa ante la creciente amenaza de conflictos globales.
Borrell advirtió que aunque la guerra no es inminente, la competencia entre grandes potencias y la militarización de la interdependencia económica están configurando un escenario de riesgo.
Borrell enfatizó la necesidad de aumentar el gasto en defensa de la UE, especialmente ante la posible vuelta del expresidente estadounidense Donald Trump, quien podría cambiar el tradicional apoyo de Estados Unidos a la seguridad europea. En este contexto, propuso la creación de un mecanismo financiero intergubernamental similar al establecido durante la crisis financiera de 2008 para respaldar a los Estados miembros en asuntos de defensa.
El alto representante de la UE para Asuntos Exteriores subrayó la importancia de fortalecer la capacidad y la responsabilidad de defensa propia de la Unión Europea, independientemente de la política estadounidense. Si bien reconoció la importancia continua de la OTAN, instó a fortalecer un pilar europeo dentro de la organización.
UE se encuentra en una fase crucial
Borrell señaló que la UE se encuentra en una fase crucial de su desarrollo, donde la competencia entre instituciones europeas por una mayor autonomía en defensa contrasta con la reticencia de algunos Estados miembros a ceder soberanía en este ámbito.
En sintonía con estas iniciativas, la Comisión Europea presentó en marzo una estrategia para impulsar la industria militar europea, con objetivos ambiciosos para el año 2030 y 2035. Estas medidas buscan fortalecer la autonomía y la capacidad de defensa de la Unión Europea en un entorno internacional marcado por la volatilidad y la incertidumbre geopolítica.
