El gobierno de Brasil anunció la creación de un centro de recepción con ayuda humanitaria para los brasileños deportados desde Estados Unidos. La ministra de Derechos Humanos y Ciudadanía, Macaé Evaristo, informó que el centro de apoyo estará ubicado en el Aeropuerto Internacional Tancredo Neves, en Confins, región metropolitana de Belo Horizonte. La decisión se produce después de que Brasil protestara y denunciara el maltrato infligido por agentes migratorios estadounidenses a los brasileños deportados.
El primer vuelo con 88 brasileños deportados por Estados Unidos llegó el sábado pasado, con personas esposadas y atadas, sin aire acondicionado en el avión ni asistencia sanitaria ni alimentaria, lo cual provocó la intervención de la Policía Federal brasileña para rescatar a los migrantes apenas aterrizó el avión en el aeropuerto de Manaos, estado de Amazonas.
En respuesta a estos incidentes, Brasil exigió respeto y dignidad para sus ciudadanos repatriados. El gobierno brasileño convocó al jefe de la Embajada de Estados Unidos en Brasilia para dar explicaciones sobre el trato dado a los deportados.
Simultáneamente, Ecuador recibió un vuelo adicional con 80 migrantes ecuatorianos deportados desde Estados Unidos el 28 de enero. La Cancillería ecuatoriana activó de inmediato los protocolos interinstitucionales para ofrecer asistencia primaria y garantizar el respeto de los derechos de los retornados. En la recepción estuvieron presentes representantes de los Ministerios de Inclusión Económica y Social, del Interior, de Salud Pública y la Cruz Roja, entre otras instituciones.
Estas acciones reflejan la creciente presión migratoria en América Latina debido a las políticas migratorias de la administración estadounidense. Brasil y Ecuador han reforzado sus esfuerzos para garantizar una recepción digna y humanitaria a sus ciudadanos repatriados, mientras continúan las conversaciones diplomáticas para abordar las condiciones de las deportaciones.
