En un reportaje especial sobre la experiencia de los niños que emigran a España, tres jóvenes valientes de Argentina y Venezuela comparten sus historias de cambio, desafío y adaptación en un nuevo país.
Camila, de 8 años proveniente de Argentina
Comparte sus sentimientos de alegría y añoranza al enfrentar su nueva vida en España. Aunque extraña la comida y a sus amigos de su país natal, se siente feliz en su nuevo hogar, destaca su amor por aprender inglés junto a catalán, además le encanta sus clases de natación.
Aunque inicialmente le costó adaptarse, su mensaje para otros niños es simple pero poderoso: “Si se pueden adaptar, solo deben tener paciencia”.
Sofia, una niña de 9 años originaria de Venezuela
Relata cómo se fue acostumbrando rápidamente a su nueva vida en España, está agradecida por las oportunidades de aprendizaje que ha encontrado en el país.
Aunque extraña a sus amigos, se siente satisfecha con la nueva vida y disfruta de sus clases de matemáticas, educación física y música, así como de sus clases de danza urbana.
El mensaje inspirador para otros niños es claro: “Si se esfuerzan, pueden lograr adaptarse. Es muy bonito y les va a gustar”, expresó Sofia.
Antonella, de 10 años de Argentina
Destaca la extrañeza que siente por su país, pero también a sus amigos en Argentina, pero comparte su sorpresa y alegría al darse cuenta de su capacidad para adaptarse y aprender en su nuevo entorno.
Relató que le gusta España, además disfruta de sus clases de lectura, castellano y música, así como de los hermosos paisajes que ofrece el país.
Su mensaje de esperanza para otros niños es que, con la ayuda de nuevos amigos, podrán adaptarse y prosperar en su nueva vida.
Estas historias son un recordatorio conmovedor del espíritu resiliente de los niños migrantes, que enfrentan desafíos con valentía y determinación mientras buscan un futuro mejor para sí mismos y sus familias.
