Un recorte multimillonario que paraliza proyectos clave
Business Insider detalla que el bloqueo de subvenciones —incluido un proyecto de 2,5 millones $ sobre alzhéimer— forma parte de una ofensiva que condiciona la financiación a la eliminación de iniciativas DEI en campus y hospitales. La agencia AP estima que las nuevas partidas presupuestarias recortan entre un 40 % y un 55 % los fondos de investigación biomédica y medioambiental, forzando despidos masivos y el cese de hasta 180 empleos solo en la Universidad de Columbia.
Testimonios de la diáspora
«No merece la pena quedarse. Me voy a Alemania para poder seguir investigando» — Danielle Beckman, neuróloga de la Universidad de California Davis.
En la radio pública NPR, el entomólogo Armando Rosario-Lebron relata cómo aceptó un doctorado en el Reino Unido tras ver bloqueadas miles de solicitudes de ayudas.
Programas que compiten por el talento
Canadá: Canada Leads 100 Challenge
El hospital University Health Network de Toronto prevé contratar a 100 científicos de carrera temprana; ya ha recibido 400 solicitudes y destinará 15 M $ en su primera fase.
Francia: Make Our Planet Great Again renueva empuje
El programa lanzado por Emmanuel Macron en 2017 ofrece contratos de hasta 1,5 M € y visados rápidos. La ecóloga texana Camille Parmesan dirige hoy una estación del CNRS en los Pirineos gracias a esta iniciativa.
Australia: Global Talent Attraction Program
La Academia Australiana de Ciencias urge a “actuar con rapidez” para aprovechar una “oportunidad única en un siglo” y plantea paquetes de reubicación y visados acelerados para académicos y sus familias.
Impacto potencial en la supremacía científica de EE. UU.
Expertos advierten de efectos a largo plazo: pérdida de Premios Nobel futuros, ralentización de avances en IA y amenazas a la seguridad sanitaria global. “Una vez que se pierde la ventaja, cuesta décadas recuperarla”, alerta el Nobel de química Robert Lefkowitz.
Próximos pasos y reacción de Washington
La Casa Blanca defiende que la revisión de proyectos “evita el despilfarro” y preserva la “dominancia innovadora” del país, mientras el NIH afirma que sigue “comprometido” con la fuerza laboral científica. Universidades y sociedades profesionales preparan demandas para frenar los recortes o, al menos, ganar tiempo mientras sus investigadores buscan refugio en el exterior.