El músico y lutier gallego, conocido por su habilidad en la reconstrucción de instrumentos históricos, deslumbró al público en Bilbao y colaboró en la nueva película de Ridley Scott, llevando los sonidos de la Antigua Roma a Hollywood.
El músico gallego Abraham Cupeiro ofreció un espectáculo único el pasado 10 de noviembre en el Teatro Campos Elíseos de Bilbao, donde transformó objetos cotidianos como una pajita en instrumentos musicales. Cupeiro, quien ha dedicado su vida a la recuperación de sonidos ancestrales, presentó algunos de sus instrumentos históricos más icónicos, como el cárnix celta y el cornu romano, impresionando al público con su talento y creatividad.
Cupeiro ha alcanzado un nuevo hito profesional al participar en la banda sonora de Gladiator II, la esperada secuela dirigida por Ridley Scott. En esta producción, trabajó junto al compositor Harry Gregson-Williams, quien lo contactó tras descubrir su talento en redes sociales. Cupeiro utilizó réplicas de instrumentos antiguos para recrear la atmósfera sonora de la Roma Antigua, aportando autenticidad a la película que se estrenará la próxima semana.
Con una colección de más de 200 instrumentos históricos, muchos fabricados por él mismo, Cupeiro ha sido apodado el "Indiana Jones de los instrumentos perdidos". Su trayectoria incluye colaboraciones con orquestas de renombre y una agenda repleta de conciertos internacionales en países como Alemania, Australia y Estados Unidos.
Además de sus incursiones en el cine, Cupeiro se dedica a divulgar el valor cultural de los instrumentos históricos a través de su espectáculo Resonando en el pasado, que combina música y pedagogía para acercar al público a la historia sonora de la humanidad.