World Liberty Financial, el proyecto vinculado al expresidente Donald Trump, ha acuñado 100 millones de USD1 como stablecoins en la blockchain de Solana. Esta emisión se adelanta al lanzamiento de su token de gobernanza, previsto para hoy 1 de septiembre, y eleva el suministro total de USD1 a aproximadamente 2,4 mil millones de dólares, consolidando su presencia en el ecosistema de stablecoins.
Expansión técnica en Solana
El USD1, una stablecoin vinculada al dólar estadounidense lanzada en marzo de 2025, ha sido oficialmente desplegada en la blockchain de Solana, donde se acuñaron 100 millones de tokens como parte de su expansión multibloquechain —ya estaba presente en Ethereum, BNB Smart Chain y TRON— .
Esta integración implicó soporte técnico a través de protocolos como Raydium y BONK.fun, buscando aprovechar la velocidad y bajos costos de transacción de Solana en el creciente ecosistema DeFi.
Impulso estratégico y contexto de mercado
Con esta emisión, el suministro de USD1 alcanza aproximadamente 2,4 mil millones de dólares, posicionándolo entre las stablecoins más relevantes del mercado.
Se espera que su despliegue en Solana atraiga liquidez adicional al ecosistema DeFi, favoreciendo su adopción en protocolos de préstamo, trading y pagos.
Lanzamiento inminente del token de gobernanza
El proyecto se prepara para el lanzamiento de su token de gobernanza (WLFI) el 1 de septiembre, coincidiendo con un amplio interés del mercado reflejado en un fuerte aumento en el volumen de derivados y en el listaje del token en exchanges como Binance.
Vinculación con Trump y controversia ética
World Liberty Financial ha sido promovido como respaldado por Donald Trump y su familia, quienes poseen el 60 % de la empresa y reciben hasta el 75 % de los ingresos por ventas de tokens. El USD1 también fue seleccionado para respaldar una inversión de $2 mil millones de un fondo de Abu Dhabi en Binance, generando advertencias sobre posibles conflictos de interés.
El proyecto ha sido objeto de crítica regulatoria en EE.UU., donde la legislación sobre stablecoins —como el estado del proyecto conocido como “Genius Act”— enfrenta cuestionamientos por conflictos de interés