AP revela el apoyo tecnológico estadounidense al “estado de vigilancia” chino

Gigantes tecnológicos de EE.UU. ayudaron a construir el aparato de vigilancia de China, según investigación de AP

Tecnología de reconocimiento facial

Una exhaustiva investigación de Associated Press, publicada hoy, revela el amplio papel jugado por empresas tecnológicas estadounidenses como IBM, Dell, Intel, Microsoft, Cisco, NVIDIA y otras, en la construcción del sistema de vigilancia digital chino durante los últimos 25 años. Estos avances facilitaron abusos de derechos humanos de una magnitud sin precedentes.

La investigación, basada en más de 100 fuentes, miles de documentos internos —incluyendo materiales gubernamentales chinos clasificados y archivos filtrados de empresas de vigilancia— y entrevistas en múltiples continentes, expone la implicación directa de empresas estadounidenses en la arquitectura tecnológica de vigilancia china.

Empresas involucradas y tecnologías suministradas

Las compañías identificadas proporcionaron tecnologías clave:

  • IBM: sistemas de análisis de vigilancia instalados en inteligencia nacional y contravigilancia.

  • Dell y VMware: soluciones de almacenamiento para vigilancia étnica.

  • Intel y NVIDIA: chips para potenciar inteligencia artificial aplicada a vigilancia.

  • Thermo Fisher Scientific: kits de ADN diseñados para identificación étnica.

  • Cisco, Amazon Web Services, Western Digital, Toshiba, Sony, Seagate: hardware e infraestructuras utilizadas por agencias policiales.
    Estas tecnologías permitieron la aplicación de sistemas como la “Policía predictiva”, reconocimiento facial y dactilar, censura, y monitorización en tiempo real según etnia o región.

Aplicaciones y consecuencias en Xinjiang

Los sistemas proveídos respaldaron la plataforma “Golden Shield” y el sistema IJOP, ambos utilizados para la detención masiva y vigilancia preemptiva de minorías étnicas, especialmente en Xinjiang, donde hasta un millón de uigures han sido internados.
La infraestructura tecnológica permitió interceptar una amplia gama de datos: llamadas, mensajes, pagos, desplazamientos, vídeos, correos, e incluso consumo de agua y electricidad.

Testimonios y víctimas

El caso emblemático de la familia Yang en Jiangsu expone el impacto personal del sistema: persecución, vigilancia digital continua, acoso, y restricciones constantes.
Una de las hijas de la familia afirmó: “En este momento, somos nosotros los chinos quienes sufrimos las consecuencias, pero tarde o temprano, los estadounidenses y otros también perderán sus libertades.”

Cuestionamientos legales y éticos

A pesar de alertas de legisladores y grupos de vigilancia, muchas empresas continuaron vendiendo estas tecnologías, aprovechando vacíos en las leyes de exportación y sanciones.
Aunque algunas empresas aseguran haber cortado lazos o alegan desconocimiento del uso indebido, la investigación muestra que muchas siguieron promocionando sus productos en círculos policiales chinos.

Riesgo global y reflexiones finales

El modelo de vigilancia construido con tecnología estadounidense no solo ha consolidado un “estado de vigilancia” en China, sino que también constituye una advertencia global: este sistema está siendo replicado en otros países, planteando riesgos crecientes para las libertades civiles en todo el mundo