Secretario de la OTAN subraya que la guerra nuclear nunca debe librarse
El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, lanzó una advertencia directa al presidente ruso Vladimir Putin, afirmando que “la guerra nuclear nunca puede ser ganada y nunca debe ser librada” en medio de crecientes tensiones por posibles pruebas de armas nucleares.
En declaraciones recientes en el contexto de la escalada de las tensiones nucleares, el dirigente de la OTAN, Mark Rutte, subrayó que la guerra nuclear es una amenaza que no solo aboca a una devastación total, sino que es una opción que nunca debería considerarse ni emprenderse. Sus palabras llegan en un momento en que Rusia ha manifestado preparativos para reanudar pruebas nucleares tras más de tres décadas, generando inquietud a nivel internacional y un aumento en la retórica bélica entre potencias.
Rutte recordó que ningún conflicto nuclear puede tener un ganador debido a las consecuencias catastróficas ambientales, humanitarias y geopolíticas, haciendo un llamado a la responsabilidad para mantener la estabilidad y evitar la escalada que podría desencadenar una crisis global irreparable. Además, enfatizó la importancia de la disuasión creíble y la preparación defensiva para proteger a los países miembros de la OTAN, destacando que la alianza está preparada para responder a cualquier agresión, pero siempre con la premisa de evitar confrontaciones nucleares directas.
La advertencia de Rutte se produce en un contexto donde el “teléfono rojo” entre Rusia y Estados Unidos permanece desconectado, dificultando la comunicación para evitar malentendidos o crisis accidentales. También señaló que la modernización de las fuerzas nucleares rusas, junto con la cooperación estratégica con países como China, representa una amenaza persistente que obliga a los aliados a fortalecer sus capacidades militares y de defensa en múltiples frentes.
Finalmente, Rutte hizo un llamamiento a la comunidad internacional y a los países miembros para incrementar la inversión en tecnología avanzada y defensa para garantizar la seguridad colectiva en un entorno global cada vez más incierto, insistiendo en que la única manera de preservar la paz es a través de la firmeza, la cooperación y el rechazo absoluto a cualquier uso de armas nucleares.